Con más de 260 millas de costa y cercanía al Valle Central, la zona combina playas, áreas protegidas, atractivos culturales y servicios de alojamiento, consolidándose como uno de los principales polos turísticos del país
La región turística de Puntarenas y las Islas del Golfo se extiende por 1.517 millas cuadradas y cuenta con 264 millas de línea costera. Su geografía une la península de Nicoya y la ciudad de Puntarenas mediante transporte marítimo, abarcando un territorio que combina playas, islas y áreas naturales de gran valor.
El centro de la zona se encuentra en la ciudad de Puntarenas, que funciona como lugar de alojamiento, distribución, puerto de escala y punto de partida de excursiones. Allí se concentran opciones que van desde hoteles tradicionales hasta complejos con todo incluido, lo que la convierte en una base estratégica para visitantes nacionales e internacionales.
La región destaca por su cercanía al Valle Central: se encuentra a tan solo dos horas en auto y a 74 millas de la capital. Esto favorece su conectividad y la posiciona como un destino clave dentro de la oferta turística de Costa Rica.
Entre sus principales atractivos se encuentran playas, ensenadas y ríos navegables, además de reservas y áreas protegidas tanto terrestres como marinas. El listado incluye referentes de conservación como Monteverde y Cabo Blanco, además de múltiples islas como Chira, San Lucas o Tortuga, que aportan diversidad cultural y natural a la experiencia del visitante.
El área también concentra una rica oferta cultural, con propuestas como el Museo Histórico Marino y festividades tradicionales como la Virgen del Mar o los carnavales de febrero, que refuerzan el atractivo de la región.
Con esta variedad de recursos, Puntarenas se reafirma como un destino versátil, ideal para extender estadías y diversificar las experiencias que ofrece Costa Rica a sus visitantes.
